Fotografía contemporánea por Francisco González Fernández.

Sue Bryce «Portraits»

No es nada sencillo conocer las cualidades morales de las personas ni resulta tan simple poder sentenciar, sin lugar a la duda, cómo es cada cual en su fuero interno y en lo más profundo de su espíritu o de su alma.

Sin embargo y a pesar de todo, hoy en día resulta muy simple opinar de los demás y hasta a veces condenar a otras personas por medio de un simple clik con el que corroboramos una mera opinión de otro o sustentamos una vana y superficial suposición de cualquiera, y todo ello sin tan siquiera preocuparnos de saber qué es lo que dice o escribe la persona que es criticada y vituperada.

La vida actual en la era de la supercomunicación y de la posverdad nos demanda nuevos protocolos, nuevas herramientas y nuevas formas de relacionarnos sin poner en riesgo la integridad física y moral de todos nosotros, sin tener que renunciar a nuestra condición humana en beneficio de un trol.

Desde los inicios de la fotografía el género del retrato ha tratado de poder mostrar los atributos físicos y morales de quienes aparecían en la imagen fotográfica. Tal vez se haya tratado de un intento iluso por desentrañar el misterio de la vida, pero sin duda no puede negarse que tal empeño haya supuesto un esfuerzo artístico por mostrarnos la esencia pura del ser humano.

Sue Bryce (1971, Nueva Zelanda) tiene un talento especial para el retrato fotográfico y es una de las fotógrafas de este género más valorada así como premiada y su obra es comparada con la de otros y otras grandes de la historia de la fotografía.

Si, como digo, no es sencillo conocer la esencia del ser humano menos fácil resulta captar esa condición a través del retrato fotográfico aunque Bryce lo consigue mostrándonos la naturaleza humana de manera esplendorosa y bella.

 

Foto portada y fotos de Sue Bryce.